Se trata de un mecanismo de rastreo en tiempo real que puede ser revisada desde el celular. Su ingenio se roba todos los aplausos.
Diferente a un chip en el que alguien que se encuentra a la mascota, escanea el código y llama al dueño, este dispositivo se introduce en la pechera del animal y le permite al humano saber sus recorridos.
Se llama Akitoy y, aunque fue pensada para mascotas, también se puede utilizar en personas con alzhéimer y hasta carros.