Las autoridades esperan que el incendio en Barranquilla
quede apagado esta noche. Por ahora, continúa encendido un tanque de combustible con al menos el 20% de la sustancia y tres remolcadores siguen lanzando agua desde el río Magdalena para evitar que las llamas alcancen el otro depósito que se encuentra a escasos metros, cargado con 39 mil barriles de gasolina para avión.
Día y noche, por los menos 100 bomberos de diferentes instituciones intensifican las maniobras para acabar con este incendio. Cada maniobra “nos va a acercando hacia el objetivo que es, primero, controlar y luego poder extinguir” las llamas, manifestó el alcalde de la ciudad, Jaime Pumarejo.
La vía 40, la más importante en la zona industrial, sigue cerrada por seguridad. Miles de habitantes en barrios aledaños, como en el sector de Las Flores, están muy afectados. Los restaurantes están abiertos, pero sin clientes, porque no hay acceso a este sector de la ciudad.
“No entra nadie porque están totalmente las vías cerradas, en los restaurantes estamos quietecitos esperando que se normalice para ver si volvemos a empezar y que vengan los clientes nuevamente”, contó Tarcisia Berrío, comerciante afectada por el incendio en Barranquilla.
Por su parte, Abraham Ochoa dice que se le está escapando la mejor época del año: “Este era el mes de rebuscarse uno y nada, no señor; allí se vendía mucho desayuno, y nada, también está cerrado todo”.
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Las autoridades confirman que más de 54 mil barriles de combustible han sido consumidos por las llamas por el incendio en Barranquilla.
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