Valeria Guerrero llegó a Colombia el pasado primero de mayo en delicado estado de salud y procedente de Rusia, donde estaba estudiando Medicina y le diagnosticaron cáncer. Tras varios meses de tratamiento en una clínica de Barranquilla, la joven está a punto de vencer a la enfermedad.
“Se decide rápidamente iniciar tratamiento de quimioterapia de primera línea. Se hace el pedescam, que es la estratificación de imágenes, y se verifica que la enfermedad no está presente, lo cual es de muy buen pronóstico”, dijo José Marún, internista de la Clínica General del Norte.
Valeria Guerrero, de apenas 21 años de edad, fue diagnosticada con linfoma de Hodgkin mientras se encontraba en Europa. Ahora, ella y su familia se llenan de esperanza.
“Quiero darle las gracias primeramente a Dios, como dice mi mamá. Fue bastante desconcertante todo lo qué pasó. Yo no tenía muy claro qué era lo que venía y lo que iba a pasar”, afirmó la joven.
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Martha Storino, la madre de Valeria, aseguró que, gracias a la “divina voluntad y misericordia” de Dios, “todas las cosas están saliendo bien” y “están fluyendo”.
Sin embargo, la joven estudiante de medicina seguirá recibiendo un tratamiento especializado.
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“Una vez terminada la quimioterapia, (se debe) revaluar otra vez, por imágenes, cómo está la enfermedad, para verificar si definitivamente desapareció. Si es así, se hacen controles por lo menos durante cinco años”, explicó el doctor Marún.
La joven de 21 años, quien pudo volver a Colombia en medio de la pandemia del coronavirus COVID-19, dice que quiere continuar la carrera de medicina en Rusia, donde estudiaba a través de una beca por ser una destacada estudiante.