Autoridades se refirieron a las consecuencias del atentado y aseguraron que se reforzará la seguridad para hacerle frente a los violentos. Podría tratarse de un ataque extorsivo.
El atentado se dio en la noche del 29 de enero de 2020, en Jamundí, Valle del Cauca, con un artefacto explosivo, al parecer, de bajo poder, con un radio de aproximadamente 2 metros cuadrados.
El elemento cayó a solo un paso de distancia de un dispensador de combustible.
Según informó el alcalde de Jamundí, Andrés Felipe Ramírez, el hecho solo dejó daños materiales.
“No hubo personas lesionadas, solo daños materiales, vidrios, un vehículo afectado por esquirlas. Los hechos son materia de investigación. No vamos a dejar que los violentos se apropien de esta comunidad, vamos a unirnos para superar esta difícil situación”, dijo.
El mandatario de Jamundí resaltó que en la mañana de este 30 de enero de 2020 se llevaría a cabo un consejo de seguridad para definir las medidas necesarias.
“Necesitamos que la Policía nos cumpla con los compromisos, necesitamos un comando unificado, un comando situacional para reforzar la seguridad, para que la gente esté tranquila y para que los violentos entiendan que tenemos que salir adelante”, agregó.
Al hablar de las posibles causas, el alcalde de Jamundí explicó que una de las principales hipótesis que se manejan es que podría tratarse de un ataque extorsivo al dueño del establecimiento.
Entre tanto, unidades de investigación criminal trabajan en actividades de recolección de evidencias y verificación de videos para esclarecer lo ocurrido.
Vea también: Cuando estaba con su familia, una niña de 12 años resultó gravemente herida por artefacto explosivo