Medellín podría ser sede de la final de la Copa Libertadores entre River y Boca

Por medio de Twitter Federico Gutiérrez, el mandatario medellinense, extendió la invitación a la Conmebol.

“En caso de que la Conmebol tome la decisión de jugar el partido de la final de la Copa Libertadores entre Boca y River Plate, en una ciudad neutral, ofrecemos a Medellín como escenario de fútbol en paz”, publicó Gutiérrez.

El máximo escenario deportivo de los antioqueños, ubicado sobre la avenida Centenario, ya ha sido anfitrión de eventos como la final de la Copa Libertadores disputada entre Atlético Nacional e Independiente del Valle de Ecuador.

Además, estaba preparado para que allí, el verde recibiera a Chapecoense, precisamente hace dos años.

Sin embargo el accidente del avión en el que viajaba hacia Medellín la delegación brasilera privó a los paisas de vivir una fiesta y el escenario se convirtió en un lugar de reflexión y apoyo hacia el club brasilero: albergó 50 mil personas en sus tribunas y más de 100 mil en sus alrededores.

El Atanasio Girardot, con más de 50 años de historia, alberga los encuentros deportivos del Deportivo Independiente Medellín y Atlético Nacional. Es un espacio propiedad de la Alcaldía, administrado por el Instituto de Deportes y Recreación de Medellín (Inder).

Además, fue sede del Mundial Sub20 de fútbol de la FIFA en 2011 y de la Copa América realizada en Colombia en 2001.

Se han disputado allí dos finales de la Copa Libertadores, en ambas fue local Atlético Nacional contra Gremio e Independiente del Valle.

En caso de llegar a darse esa posibilidad, no sería la primera vez que Boca y River pisen su gramado. Las dos escuadras se han enfrentado a los clubes Independiente Medellín y Atlético Nacional por Libertadores y Copa Suramericana, como en la que River derrotó al verde en 2014.

La invitación del alcalde Gutiérrez se da en medio del escándalo por el que fue suspendido el partido de vuelta entre River y Boca que debía disputarse en el Monumental de Buenos Aires el 24 de noviembre.

Ese día, seguidores del club millonario atacaron a piedra el bus en el que los jugadores de Boca se dirigían a la cancha. Como resultado, Pablo Pérez, insignia del equipo boquense resultó con lesiones en uno de sus ojos y otros futbolistas sufrieron heridas en brazos y rostro.

Luego de esto, el partido fue suspendido cuando unos 60 mil hinchas esperaban su inicio y no se ha definido si será disputado: Boca reclama los puntos como sanción a River y este último pide que el juego se realice para que se defina el campeón de este torneo.

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Foto: Colprensa