Kuo, como se llama el pastor alemán, fue abandonado por los delincuentes y rescatado por un guardia de seguridad que lo devolvió a su pequeña dueña.
“Gracias a Dios”, dijo con la voz entrecortada el papá de la niña de 5 años, que pedía volver a ver a su mejor amigo.
El perro le fue arrebatado a la familia en Bogotá cuando hombres armados encañonaron a un hombre y su mamá y les robaron una moto, una camioneta y al animal, que estaba dentro del vehículo.
El pasado sábado en la madrugada, Kuo llegó al lugar de trabajo del guardia de seguridad “buscando refugio”, contó su dueño.
El vigilante se puso en contacto con el hombre, que a diario buscaba a su mascota porque su hija tenía el dolor de haber perdido a su mejor amigo.
El feliz reencuentro se dio este lunes y el pastor alemán volvió a los brazos de su pequeña amiga.