Huellas alteradas, fotos plagiadas, firmas falsas: el fraude y la suplantación de identidad son más comunes de lo que cualquiera se imagina. Y es que a diario se presentan casos como el de César Mora, que soñaba con tener una vivienda y solicitó un crédito. Sin embargo, lo que nunca se esperó es que le fuera negado y lo peor, la razón: aparecía como deudor de varias líneas de teléfono que están a su nombre.
“Se me hizo muy raro porque con ese operador celular no había tenido líneas. Me acerqué y no eran, una, ni dos sino tres líneas que habían sacado a mi nombre”, cuenta Mora.
“Lo increíble es que las líneas estuvieron activas por más de 4 años pero dejaron de pagarlas y por eso cesar fue reportado, lo grave es que no sabe quién lo hizo”, agrega.
En este caso se interpuso una reclamación ante la empresa y la cobranza fue anulada. La duda que surge, es: ¿cómo se están robando los datos?
Publicidad
En este momento las autoridades investigan a cinco organizaciones de más de 10 personas que estarían detrás de esta clase de fraudes por suplantación.