Panorama del horror en Cauca: no paran los homicidios contra las comunidades de ese territorio

En la última semana, al menos 12 personas han sido asesinadas en hechos violentos en el norte del Cauca.

Dos masacres en Toribío y otra en Corinto componen el doloroso panorama. Mientras los habitantes viven en medio de la incertidumbre y el horror, las autoridades buscan a los responsables de los crímenes.

El pasado martes 29 de octubre del 2019, presuntos disidentes de las FARC asesinaron a cinco indígenas en el resguardo de Tacueyó, municipio de Toribío, cuando atendían un presunto caso de secuestro. Entre las víctimas estaba la líder Cristina Bautista.

Precisamente, Bautista, días antes de ser masacrada, les pidió a los violentos que abandonaran el territorio.

Tras estos hechos, el presidente Iván Duque ordenó el envío de tropas al Cauca, pero 24 horas después, una nueva masacre conmocionó a las comunidades del norte de ese departamento: cuatro personas fueron asesinadas.

Esta incursión armada tuvo lugar en los límites entre Corinto y Caloto. Entre las víctimas estaban un ingeniero agrícola, un estudiante de ingeniería industrial, un militar retirado y un conductor. Ellos se encontraban realizando labores de topografía.

No habían pasado 48 horas de la segunda tragedia, cuando, nuevamente, la violencia despertó a los habitantes de tres veredas del corregimiento Los Andes, en Corinto.

Mientras los combates se arreciaban en esta zona, en Suárez, Cauca, fue asesinado Fabián Rivera Penagos, escolta adscrito a la Unidad Nacional de Protección, UNP, a manos de hombres armados.

El panorama del horror lo completaría, horas después, el crimen de Alexander Vitonas Casamachin, un joven indígena de apenas 18 años asesinado cuando llegaba a la casa de su familia.