Pese a ser desplazada por la violencia, la etnia wounan se niega a dejar morir sus tradiciones

Tuvieron que dejar sus tierras en Chocó y empezar una nueva vida en Bogotá, donde cuidan sus artesanías y el conocimiento adquirido por sus ancestros.

Outown, una organización que ayuda a visibilizar a emprendedores locales, vela para que 140 familias pueda mantener vivas sus enseñanzas.

Aunque por cuestión de terreno los wounan no pueden desarrollar sus trabajos de agricultura, siempre recordarán ese territorio que les dio la vida, del que tuvieron que salir un día sin explicación alguna, pero que ni la violencia podrá quitarles su esencia, esa que mantienen viva desde la ciudad.