Prefirieron recibir clases en una carretera, pues no resistieron el olor que salía de una marranera ubicada al lado de su colegio. Sucede en Sincelejo.
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Prefirieron recibir clases en una carretera, pues no resistieron el olor que salía de una marranera ubicada al lado de su colegio. Sucede en Sincelejo.
Publicidad