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¿Por qué ocurren los deslizamientos en la Vía al Llano? Estudio tiene la respuesta

Descarta que granjas de pollos ubicadas en el kilómetro 58 sean las responsables. Hablan las partes involucradas.

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Un estudio realizado por la Sociedad Colombiana de Ingenieros y tres universidades le puso el ojo al calvario de la Vía al Llano y los cierres por tantos derrumbes.

En el cruce de culpas por quién es el responsable de la situación que ha aislado en varias ocasiones a los Llanos Orientales, Coviandes había negado que sus labores tuvieran algún impacto y, en cambio, señaló como culpable a Pollo Olympico, empresa que tiene más de 10 granjas en Cundinamarca, una de ellas ubicada en Guayabetal.

La vía de menos de 90 kilómetros lleva casi 40 años de construcción.

Sin embargo, el informe de la Sociedad Colombiana de Ingenieros dirimió las diferencias y hundió la teoría que le atribuía a la granja avícola el derrumbe del kilómetro 58 en la vía Bogotá-Villavicencio. Además, evidenció el efecto que tuvo la excavación de un túnel en el mismo punto.

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“El estudio lo que dice es que la situación se presentó por la excavación del túnel 13, que queda justo debajo de nuestra granja”, afirma Nicolás Vásquez, gerente de Pollos Olympico, que agrega que la situación que enfrentaron fue “una pesadilla”.

La ANI, encargada de liderar y contratar el estudio, dice que ahora están trabajando en garantizar la transitabilidad por el kilómetro 58, “que es lo más importante en este momento”.

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También, que investigarán a mayor profundidad si la responsabilidad es totalmente de Coviandes.

“Durante toda la etapa de construcción del túnel no se presentó ningún fenómeno que mostrara algún problema mayor a los que normalmente se presentan en este tipo de estructuras y también recordemos que el túnel fue terminado en 2015 y el problema se empieza a generar años después”, indica Carlos García, vicepresidente ejecutivo de la ANI.

Por su parte, Coviandes precisa que el estudio “no responsabiliza a la concesionaria ni por la desestabilización de la ladera ni por los daños que ha sufrido el túnel 13”.

“Hay que aclarar que el estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros, como ellos mismos lo denominan, es un estudio de riesgo, amenaza y vulnerabilidad, que no es la práctica común en los estudios de ingeniería y que no es materia de obligación por parte de las normas de diseño hoy en día en el país”, dice el gerente Alberto Mariño.

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