El proyecto prometía un revolcón en la forma de hacer política en Colombia, uno de los principales retos de la implementación de los acuerdos de paz.
Entre otros cambios, buscaba crear un consejo electoral con independencia, personería jurídica para los movimientos pequeños de acuerdo a su número de afiliados y la posibilidad de que esos pequeños partidos armaran coaliciones entre ellos.
“Lo que hacía era reacomodar las diferentes bancadas e intereses políticos a los posibles resultados electorales”, explicó Alejandra Barrios, directora de la Misión de Observación Electoral (MOE).
Cada uno de estos puntos se fue descartando poco a poco.
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Una de las estocadas a la reforma fue la aprobación del transfuguismo en el Senado, que permitía a miembros de un partido cambiarse a otro si estaba en desacuerdo con hacer parte de una lista de coalición.
"No estaba tomando decisiones mirando los impactos políticos, sociales y económicos, sino que estaba tomando decisiones de acuerdo a las conveniencias políticas", cuestionó Barrios sobre este aspecto, que considera que lo mejor fue hundir el proyecto.
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Incluso el mismo Gobierno, a través del ministro del Interior, Guillermo Rivera, descartó la iniciativa en sesión del Congreso: “pasemos la página de la reforma política que definitivamente no fue la que hubiésemos querido”.
“Esperamos que con el nuevo congreso se pueda debatir paso a paso”, señaló la directora de la MOE.
Claves para entender por qué se hundió la reforma política | Noticias...