En el Cauca, departamento más golpeado por el Estado Mayor Central de las disidencias de las FARC, los líderes locales recibieron con anhelo el acuerdo anunciado por el gobierno y el grupo ilegal
de instalar una mesa de diálogos de paz. Esperan que el cese al fuego sea prioridad.
“Es muy importante que los puntos establecidos en estos acuerdos sean alcanzados con urgencia, sean prioridad el cese bilateral, la participación de las comunidades en la construcción de los escenarios de los acuerdos de paz”, declaró Mauricio Capaz, líder indígena del Cauca.
Francisco Vergara, investigador de Pares, recordó que el Estado Mayor Central, disidencias de las FARC con las que se llegó al acuerdo, “tiene su epicentro del departamento del Cauca, ellos están los 21 de 42 municipios de ese departamento”.
Elizabeth Dickinson, analista senior de Crisis Group, dijo que “ojalá el gobierno aprenda las lecciones del cese al fuego anterior, a pactar los protocolos para el cese del fuego antes de firmar el decreto, eso es importantísimo para que quede claro dentro de los decretos el respeto al derecho internacional humanitario”
Jorge Mantilla, analista en conflicto, consideró que “hay dos desafíos fundamentales: el primero de ellos es la ausencia de una agenda de conversaciones sobre la cual sentarse negociar, y el segundo de ellos, tal vez el más importante, es cómo relacionar este proceso de paz que empieza con el proceso de paz con el ELN y avanzar hacia un cese al fuego trilateral”.
También hay gran expectativa en zonas como Puerto Leguízamo, Puerto Guzmán y Puerto Caicedo, en Putumayo, donde las disidencias de las FARC hacen presencia.
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Desde allí, Ramón Apraez, asesor de la Confederación Comunal Derechos Humanos, está “esperando se inicien ya los diálogos territoriales para parar la matanza, eso es lo que necesita el Putumayo para adelantar su desarrollo, para que haya la paz y la vida en nuestra región y estamos esperando que se inicien lo más pronto posible con todas las disidencias que existen en la región”.
Delegados del Gobierno nacional y de las disidencias de las FARC se reunían desde el jueves 31 de agosto en las montañas del departamento del Cauca.
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En un comunicado conjunto anunciaron este sábado 2 de septiembre que instalarán pronto la mesa de negociaciones, aunque no detallan la fecha ni el lugar. Dicho proceso contará con la veeduría de otros países que no fueron especificados y de organizaciones internacionales como la ONU, la OEA y el Consejo Mundial de Iglesias.
En una fotografía divulgada por la Oficina del Alto Comisionado para la Paz se observa al jefe de esa entidad, Danilo Rueda, sonriente junto al jefe negociador oficial, Camilo González Posso, y el responsable para los diálogos del EMC, alias ‘Andrey’.
El jefe guerrillero, que aparece en la imagen vestido de civil y con una gorra, había condicionado el inicio de las negociaciones al regreso en vigencia del cese al fuego.
El negociador Camilo González dijo a la AFP en julio de 2023 que la intención es que los diálogos con el EMC, que según datos oficiales tenía unos 3.500 miembros en 2022, se desarrollen en territorio colombiano.
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