Los protocolos de bioseguridad en Antioquia han sido estrictos y apuntan a un solo objetivo: mitigar de manera conjunta la propagación del coronavirus .
Con controles sanitarios se realiza seguimiento a 96 municipios y se han dispuesto 22 puestos de control distribuidos de forma estratégica a las entradas del departamento, que se extienden también a diferentes puntos de ingreso al área metropolitana del Valle de Aburrá.
“Cuentan con termómetro, tapabocas, guantes, así como también con otros elementos que les entregan a los viajeros y conductores. Los profesionales de la salud revisan de forma frecuente y permanente a cada uno de los transportadores, viajeros y personas que se movilizan por las carreteras”, señaló el coronel Jorge Cabra, comandante de la Policía de Antioquia.
El sistema masivo de transporte del Valle de Aburrá es uno de los principales actores que ha tenido que reforzarse en los últimos días.
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“Con la Gobernación de Antioquia y la Alcaldía de Medellín, y con los diferentes sectores económicos de la ciudad-región, lograr el escalonamiento de horarios y así poder desconcentrar las horas de mayor pico, garantizando una movilidad segura para todos los usuarios”, puntualizó Juan David Parra, jefe de servicio al cliente del Metro.
En cuanto a la reapertura de empresas y centros comerciales, los controles son mucho más rigurosos y deben ser aprobados por la plataforma ‘Medellín me cuida’, diseñada por la Alcaldía para recolectar los datos de las empresas y sus trabajadores.
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“Las autoridades del municipio y sus diversas articulaciones van a estar haciendo revisión exhaustiva de los mismos. Esos protocolos tienen que ser para que los cumpla cada comerciante y cada empresario debe velar para cuidar la salud de sus trabajadores y la salud de sus clientes”, precisó Carlos Andrés Pineda, director ejecutivo de Fenalco Antioquia.
El trabajo articulado, no solo de las autoridades sino también la cooperación de la ciudadanía, ha facilitado en gran parte el éxito de los protocolos que buscan aportar a la mitigación en la propagación del COVID-19.