Es más fácil de lo que se imagina y no implica grandes gastos. Aquí le contamos.
1. Sustituya las bombillas incandescentes por luces LED: duran más, consumen menos electricidad y abaratan su factura de energía.
2. En lo posible, compre productos fabricados por industrias respetuosas con el medio ambiente. Estas exhiben en sus empaques certificaciones que así lo acreditan.
3. Instale dispositivos que ayuden a ahorrar. Por ejemplo, sensores o temporizadores para encender y apagar luces o administrar grifos.
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4. Lleve sus propias bolsas cuando vaya a mercar o hacer compras: eso reduce consumo de plástico y le ahorrará unos pesos.
5. Procure no consumir productos empacados en bandejas de icopor. Ese material es difícil de descomponer, por lo que se le considera nocivo para el planeta.
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Facilito y desde casa usted puede darle un respiro al planeta si sigue estas prácticas