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En Colombia, la revisión técnicomecánica es un requisito fundamental para circular legalmente por las calles. Esta evaluación, realizada en Centros de Diagnóstico Automotriz (CDA) autorizados, garantiza que su moto o carro cumpla con los estándares mínimos de seguridad y emisiones contaminantes.
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Según el artículo 28 del Código Nacional de Tránsito, “para que un vehículo pueda transitar por el territorio nacional debe garantizar como mínimo el perfecto funcionamiento de frenos, del sistema de dirección, del sistema de suspensión, del sistema de señales visuales y audibles permitidas y del sistema de escape de gases; y demostrar un estado adecuado de llantas, del conjunto de vidrios de seguridad y de los espejos y cumplir con las normas de emisión de gases que establezcan las autoridades ambientales”.
En este sentido, para el caso de las motocicletas, todas deberán someterse anualmente a la Revisión Técnicomecánica y de Emisiones Contaminantes, a excepción de las nuevas, que deberán realizarlo al cumplir 2 años a partir de la fecha de matrícula.
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Si bien la revisión técnicomecánica es un proceso relativamente sencillo, existen diversas razones por las cuales su motocicleta podría ser rechazada. Conocerlas con anticipación le permitirá tomar las medidas preventivas necesarias y evitar contratiempos:
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Batería: una batería con poca carga o en mal estado puede afectar el funcionamiento de las luces y otros componentes eléctricos, lo que derivaría en el rechazo de la revisión.
Fusibles: fusibles quemados o dañados pueden ocasionar fallos en las luces, intermitentes y otros sistemas eléctricos, impidiendo que la motocicleta supere la inspección.
Desgaste: las llantas con un desgaste excesivo o irregular en la banda de rodadura no solo comprometen la seguridad vial, sino que también son motivo de rechazo en la revisión.
Daños: cualquier tipo de daño en las llantas, como pinchaduras, cortes o deformaciones, las hace no aptas para circular y por ende, para superar la revisión técnicomecánica.
Desgaste: los frenos desgastados o con poca efectividad de frenado representan un grave riesgo para la seguridad del conductor y otros usuarios de la vía, por lo cual son motivo de rechazo en la revisión.
Fugas: fugas de líquido de frenos o daños en el sistema hidráulico comprometen el correcto funcionamiento de los frenos, lo que implicaría el rechazo de la motocicleta.
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Gases de escape: si su motocicleta supera los límites permitidos de emisiones de gases contaminantes, no podrá pasar la revisión técnicomecánica. Es importante realizar mantenimientos preventivos y ajustes al motor para reducir las emisiones.
Ruido: el nivel de ruido del escape también es un factor que se evalúa en la revisión. Si la motocicleta supera los decibeles permitidos, será rechazada.
Cumplir con la revisión técnicomecánica de su moto no solo es una obligación legal, sino que también le permite conducir con mayor tranquilidad y responsabilidad.
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