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Cambiar juntos el planeta es la misión que se ha propuesto Nestlé Colombia frente a la contaminación por plástico, uno de los principales problemas ambientales que afronta la Tierra. Cada año, ríos y océanos reciben millones de toneladas de ese material, lo que ha ocasionado graves daños a la flora y la fauna. De ahí el gran reto de la compañía de que ninguno de sus empaques termine en vertederos o como basura al finalizar la década.
Antonio Núñez, presidente de Nestlé Colombia, explica en qué consiste la estrategia que le ha valido a la empresa ser reconocida como la primera de plástico neutro en el país.
“Consiste en recuperar, transformar y revalorizar una cantidad equivalente al material plástico que usamos en nuestros envases y embalajes. En definitiva, cuando hacemos esas tareas de recuperación, transformación y revaloración estamos garantizando que esa cantidad de plástico equivalente no acabe en un relleno sanitario, contaminando un río o un océano”, expresa Núñez.
Para recuperar y aprovechar el equivalente al 100% de lo que pone en el mercado, Nestlé Colombia trabaja en tres ejes que van de la mano.
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“El primero, trabajar en reducir la cantidad de plástico en nuestros envases y embalajes. La reducción hay que abordarla desde diferentes ángulos: buscar materiales alternativos al plástico, optimizar el uso del plástico donde sea posible, buscar materiales que por sus características sean más fácilmente reciclables”, sostiene el presidente de la compañía.
En esta lucha por el medio ambiente y como parte del segundo eje, Nestlé cuenta con dos aliados estratégicos: Compromiso Empresarial para el Reciclaje (Cempre) y la multinacional Veolia. Aquí, los recicladores son una pieza fundamental en la recolección.
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“Nos toca hacer un trabajo de recuperación, transformación y revalorización. Y aquí estamos trabajando con empresas y asociaciones especializadas en estas tareas. Me gustaría destacar a dos de nuestros socios principales: Veolia y la Asociación Cempre, que a través de su Red Reciclo nos permite estar ahí recuperando ese material e integrándolo en los procesos de transformación y revalorización”, destaca Núñez.
El tercer eje es el de la sensibilización.
“Es el eje de la comunicación a nuestros consumidores pidiéndoles a que nos ayuden con gestos muy sencillos. No olvidemos que el reciclaje eficaz comienza con un pequeño gesto en nuestros hogares: separando esos materiales plásticos de materiales de cartón, hojalata, creando con esa segregación una facilitación, un inicio a ese proceso de reciclaje que después se puede hacer de manera muy eficaz”.
Compromiso y acción han sido claves para lograr resultados
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Según Núñez, “en esos procesos de transformación, todo lo que es el material PET está siendo ya reintegrado en el propósito final de nuestra iniciativa que es la reutilización en envases y embalajes. Se reintegra 100%”.
Y añade: “el polipropileno y el polietileno los estamos transformando en otros materiales que también tienen una segunda vida, en actividades que generan valor, por ejemplo, en madera plástica, elementos de mobiliario urbano y utilizarlo también en elementos que vengan a reemplazar las tarimas de madera por tarimas plásticas. Se trata de que a ese plástico que estamos recuperando le demos una utilización, una segunda vida”.
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El objetivo final de la iniciativa de Nestlé Colombia es en doble vía: reducir el consumo de plástico virgen y evitar que el plástico termine contaminado el medio ambiente.
“Neutralidad sin plásticos es un paso muy importante en la dirección correcta, pero es un primer paso. En un momento determinado, todos nuestros materiales de envase y embalaje acabarán siendo fabricados con el material que recuperamos una vez esos productos hayan sido utilizados. Esta es la visión, es lo que buscamos con este proyecto que le apunta a la economía circular y a la revalorización eficaz de los materiales”, afirma Núñez.
Garantizar la seguridad alimentaria es fundamental en toda la cadena.
“Esperamos que en 2030 como mínimo el 90% del plástico que utilizamos sea efectivamente plástico reciclado. Todo esto hay que construirlo desde la innovación, porque estamos hablando de la industria de alimentos, de un plástico que hoy tiene una funcionalidad de mantener las características de calidad y de seguridad alimentaria del producto”, sostiene el presidente de Nestlé Colombia.
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Para finalizar, Núñez insiste en la importancia de reducir el consumo de material plástico.
“Que las toneladas que debemos recuperar y transformar el año que viene sean menos, y que en ese aspecto podamos realmente decir que utilizamos justo el envase que necesitamos y nada más”.
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