La colombiana Julieth Lozano ha consagrado su vida al canto. Desde que eligió este camino, empezó a adecuar sus rutinas en función de mantenerse saludable para así demostrar su potencial en cada presentación. Se ha preparado física, mental y académicamente para enfrentarse a los retos que implican pisar las tablas, llegando a cantar incluso en siete idiomas.
Aunque su intención no ha sido ganar reconocimientos, su propósito de demostrar sus raíces y su talento la han hecho acreedora de numerosos premios. La soprano, nacida en Bogotá y graduada de la Universidad Central, es Maestra en Interpretación y Artista en Ópera del Royal College of Music en Londres.
En 2012 y en 2014 se coronó como la absoluta ganadora del concurso nacional de canto de la Orquesta Filarmónica de Bogotá y en 2018 recibió el premio del Presidente, entregado por el Rey Carlos III en Inglaterra.
Este 2023 se consagró con el premio Dama Kiri Te Kanawa, que reconoce a la ‘mejor voz del mundo’ y es otorgado por la audiencia del Cardiff Singer of the World Competition de la BBC, una de las competencias de canto más prestigiosas a nivel internacional.
De acuerdo con Julieth Lozano, este es uno de los premios más importantes de la competencia y es la primera vez, en 40 años de edición, que la votación se abre al público de todos los países del mundo. Asimismo, es la primera vez que una persona de nacionalidad colombiana logra pisar ese escenario.
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Decidió presentarse para mostrarle al mundo la riqueza cultural de Colombia y el talento de su gente: “Sentía que lo que tengo dentro de mí tenía que compartirlo, no puedo quedarme con este don. Es la forma de decirle al mundo que mire a Colombia con otros ojos”.
Aunque Julieth Lozano nació en Bogotá, sus padres son de origen caribeño. Su madre es de Barranquilla y su padre de Cartagena. Por eso, la cultura de esta región siempre ha estado con ella y es lo que más extraña estando en el exterior.
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El proceso no fue fácil, Julieth Lozano se presentó junto a otras 500 personas que tenían la esperanza de pisar el escenario de aquel concurso prestigioso. Al final, solo seleccionaron a 16 que debían pasar por cuatro filtros.
Su primera canción como participante oficial, con la cual se presentó ante la audiencia, fue un fragmento de ‘Yo me llamo cumbia’, una pieza del folclor colombiano compuesta por el maestro Mario Gareña y que ha sido interpretada por un centenar de músicos en el país.
Vestida de blanco y adornada con plumas de colores en su hombro y escote, la colombiana Julieth Lozano dio lo mejor de sí en la presentación, con el único pensamiento de compartir un don, su don: “No me imaginé llegar tan lejos, solo quería compartir mi voz”.
El atuendo, que era llamativo ante la mirada curiosa de los asistentes, fue modificado por la propia artista. Julieth se encargó de pegar una a una las plumas que ataviaban el vestido, para tener algo que le recordara a su tierra y a su familia: “Quise traer algo de mi país en mi atuendo. Mi mamá siempre me ha dicho colibrí, entonces quise tener algo de ese pajarito”.
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