Pescadores artesanales y Ecogourmet, al rescate de la fauna marina en Colombia

Conservar el ecosistema y a la vez ayudar a los pescadores fue el punto de partida de Ecogourmet, un programa de la ONG Conservación Internacional en donde la pesca responsable es la regla y el comercio justo la garantía para promover buenas prácticas.

Y es que la crisis económica causada por la pandemia del coronavirus no es ajena para los pescadores que viven de sus faenas diarias y, en su afán por conseguir recursos, pueden violar las normas de conservación.

Por eso programas como este sirven para que la actividad se desarrolle sin llevar a que el recurso pesquero colapse.

“Mi llamado al pescador que aún genera impacto negativo al medio ambiente es que construyamos mejor nuestra empresa pesquera con acciones de conservación para este recurso, evitando generar impactos negativos en el ecosistema y en el medio ambiente”, dice Robinson Mosquera, experto local de Ecogourmet Nuquí.

Mauricio y Laura Aya son los dueños de la Pesquería Mercado Gourmet en Bogotá. Desde hace un año se unieron a Ecogurmet y le apuestan a vender pescado fresco, pero también proveniente de faenas responsables.

“Más que comprar un producto responsable, vamos a darle un valor agregado para que ellos se motiven a hacer este tipo de prácticas”, dice Laura.

Juan Pablo Caldas, gerente del programa Océanos C.I., hace la siguiente reflexión: “Muchos pescadores tienden a pensar que si capturo más voy a ganar más y no es así. Yo lo que capturo lo capturo bien. Si garantizo que viene de buenas prácticas y es responsable, puedo tener mejores precios”.

Otro eslabón en esta cadena de pesca responsable es el consumidor. ¿Acaso se pregunta de dónde y bajo qué técnicas fueron capturados? ¿Si se encuentra en veda o si el tamaño es el permitido para pescarlo?

“Cuando la gente accede a productos pesqueros donde no es clara su procedencia esos pueden estar relacionados con la pesca ilegal”, explica Caldas.

En el mismo sentido se pronuncia Sandra Bessudo, directora de la Fundación Malpelo: “Creo que tenemos que ser también responsables de qué es lo que estamos consumiendo. Informémonos más de qué es lo que nos estamos comiendo”.

Dice el dicho que ‘el pez muere por su boca’, pero en este caso el pez puede morir en boca de los humanos si seguimos depredando sin razón ni conciencia.

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