Lo que parecía un operativo sencillo se complicó cuando la mascota asustadiza dio un paso en falso y desapareció en el agua.
Una persona que pasaba por el lugar dio aviso a las autoridades de la presencia de un perro atrapado en medio del hielo, en el río Milwaukee, en Wisconsin (EE. UU.).
Policías y miembros de la guardia costera se dieron a la tarea de ir a su rescate, usando un bote inflable y trajes para resistir temperaturas bajo cero.
El hombre que se lanzó al agua vio cómo el animal, en lugar de ir a sus brazos, decidió alejarse de él.
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La basura y los escombros que flotaban en el río hicieron aún más difícil la tarea del guardia costero.
Cuando el rescatista lo tenía a menos de dos metros, una capa de hielo se movió y atrapó a la débil mascota que desapareció, en medio de los gritos de angustia de los testigos que grababan el rescate desde un puente.
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Pero el hombre, en una maniobra rápida y arriesgada, saltó sobre el hielo y hundió sus brazos en el fango, para sacar al animal y salvarlo en el último segundo.
Un esfuerzo que valió la pena. El perro fue puesto a salvo y, su salvador, se ganó con todos los méritos el título de héroe.
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