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Mujer buscó a su perro sin parar durante 4 días: caminó más de 90 kilómetros

La acongojada dueña, de 33 años, intentó rastrear a su perro con un dispositivo que se dañó, pero que volvió a funcionar para darle la ubicación exacta del animal. Conozca aquí cómo terminó todo.

mujer buscó durante cuatro días a su perro
"“Perdí la esperanza porque mi cuerpo estaba muy adolorido", dijo la mujer que buscó a su perro durante 4 días.
Pixabay.

Existen personas que dicen que son capaces de hacer cualquier cosa por sus mascotasy hay otras que lo hacen. Tal es el caso de Alifiya Mohamedbhai, una mujer de Manchester que buscó, durante cuatro días, a su perrosalchicha extraviado. Su travesía ha sido aplaudida por miles de usuarios en las redes sociales.

Se conoció que la mujer temió lo peor cuando su perro salchicha desapareció mientras paseaba con un amigo.

En ese momento, la mujer de 33 años, acompañada por una amiga, emprendió la búsqueda del perro gracias a un dispositivo que le permitió rastrearlo.

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No obstante, el aparato dejó de funcionar por varias horas. Pese a eso, las dos amigas no desistieron en su cruzada por hallar al animalito, que estaba solo e indefenso.

Como por arte de magia, el dispositivo de rastreo volvió a servir y arrojó la ubicación exacta del animal.

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Las amigas siguieron las coordenadas y encontraron al perro en la ribera de un río. El animalito se encontraba sentado y solo.

En un video se ve a la mujer entrar al agua, que le llegaba hasta las rodillas, para tener entre sus brazos a la mascota, que chilla al ver a su ama.

Lo sé mi bebé, lo sé. Por fin te tengo”, fueron las palabras que mencionó Alifiya Mohamedbhai en ese momento.

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En declaraciones a Mirror, la protagonista de la historia indicó que “no podía dejar de llorar, fue una locura. Había perdido por completo la fe de encontrarla, pensé que alguien la había robado. El perro estaba absolutamente bien”.

Manifestó que durante los días en los que estuvo desaparecido el animal no tuvo paz: “La casa ha estado vacía y tranquila. Hemos echado de menos su molesto ladrido”.

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Además, sostuvo que se trató de una verdadera travesía: “Perdí la esperanza porque mi cuerpo estaba muy adolorido y casi no había dormido. Estoy exhausta, me duelen todos los huesos. Tengo ampollas en los pies”.

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