“Fue increíble lo que pasó” reconoce Rodrigo Íperri, el dueño del labrador José Ignacio, catalogado como todo un héroe al salvarlos de morir por un escape de gas en su casa en Argentina mientras dormían.
Era un día tranquilo para Rodrigo y Maillén, su esposa, que estaba cerca de dar a luz. Se acostaron a dormir como siempre, pero su mascota los despertó hacia la madrugada. “Estaba tembloroso, los ojos llorosos y como si algo le estuviera pasando, hacía un ruido raro”, explicó el hombre a Día Online .
Para intentar que se calmara lo sacaron unos minutos a la calle, en el municipio de Gualeguaychú, pero al volver entendieron la exasperación de José Ignacio: “cuando fuimos a entrar a la casa nos abombó el olor a gas”.
A pesar del frío, una madrugada con cero grados, abrieron ventanas y puertas para que hubiera ventilación y cuando se sintieron seguros volvieron a dormir, no sin antes dejarle un mensaje a la persona que los ayudaba con el mantenimiento de sus gasodomésticos.
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“Al otro día yo me sentía medio aturdido y con mucho dolor de cabeza, Maillén estaba desganada. Hablamos con una médica amiga que nos tranquilizó, pero a la tarde ella se sintió mal y fuimos al hospital, la atendieron, y como tenía presión elevada la llevaron a Maternidad. Entre los médicos hicieron las consultas y cerca de las 21 horas nació Amanda”, detalló Rodrigo.
Cuando consultaron al encargado de revisar la fuga les advirtió que provenía de un calefactor ubicado en la habitación contigua a la principal, donde ellos dormían. “Estuve haciendo algunos trabajos de refacción, seguramente hubo alguna situación que derivó en que uno de los caños del calefactor sufriera una fisura”, reconoció el dueño de José Ignacio.
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Gracias al perro labrador, esta insólita historia terminó con final feliz: “la sacamos barata gracias a José Ignacio, nuestro perro, que pudo reaccionar y despertarnos”.
Para Rodrigo, José Ignacio salvó cuatro vidas, “las nuestras, la de Amandita y su propia vida”.
“Fue increíble el instinto del perro para despertarnos aun sintiéndose mal por la intoxicación que estaba sufriendo”, concluyó el agradecido amo.