Se trata de Jonathan, que viajaba por primera vez en avión para conocer el mar. Su destino era el puerto de Mazatlán.
La azafata de mayor rango le dio al niño las barras del capitán del vuelo 1152, de la aerolínea Viva Aerobus.
En medio de aplausos y lágrimas, el pequeño recibió su distinción.
Y su sueño de conocer el mar ya se hizo realidad.