Ninguno estaba dispuesto a ceder su espacio en el estanque del zoológico, ubicado en Estados Unidos.
El video, grabado por un visitante, inicia de una manera muy graciosa: el pequeño elefante llena su trompa de agua y empieza a lanzarle chorros al atrevido visitante.
Aunque se ve pasivo, el plumífero invasor espera a que su contrincante se descuide y cuando gira, alza sus alas y se le monta.
El contraataque no se hace esperar y viene un cruce de picotazos y embestidas, que en un momento incluye una patada del paquidermo.
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Vea el desenlace de la historia.
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