La mujer de 54 años contactó a un hombre por redes. Este le pidió recoger unos documentos que resultaron siendo un kilo de anfetaminas.
María Elvira Pinto creía que iba a conocer a su amor en un viaje de China a Australia. Antes del encuentro el sujeto le pidió el favor que la terminó condenando en Malasia.
Después de tres años litigando en una corte, la justicia la declaró no culpable y quedó libre.