Una grave denuncia hicieron grupos defensores de los Derechos Humanos en Siria, que aseguran que el Ejército de ese país lanzó desde el aire bombas ligadas con gas de cloro. Según el informe, por lo menos 33 personas están siendo tratadas por inhalación del gas tóxico.
El ataque aéreo sucedió en idlib, la misma ciudad donde rebeldes sirios derribaron ayer un helicóptero ruso, en el que murieron cinco personas.
Se cree que el ataque de hoy es en represalia por ese hecho. El ejército sirio aún no se ha pronunciado frente a los señalamientos.