Lilian Tintori, esposa del opositor preso Leopoldo López, dijo este jueves tener la convicción de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, "está con el pueblo de Venezuela" tras reunirse con él el miércoles en la Casa Blanca.
"Trump está con el pueblo de Venezuela y también los congresistas. En la Casa Blanca se respira preocupación por Venezuela (...) Sentí que la prioridad de su política exterior es Venezuela", dijo Tintori a su arribo a Caracas procedente de Washington.
En declaraciones a periodistas en el aeropuerto de Maiquetía, señaló que la ratificación este jueves de la condena a casi 14 años de prisión contra su esposo es "nula".
"En dictadura toda sentencia es nula. Hay 109 presos políticos en Venezuela y todos tienen que salir", expresó.
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Tras la cita del miércoles, Trump pidió en su cuenta de Twitter la liberación de López, y publicó una foto con la esposa del dirigente, algo que la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, calificó de "intromisión y agresión".
"El Twitter sirve para el chisme, para uno enterarse de cosas que dan vergüenza como la foto esa. Dan pena ajena (...) La Malinche (traidora)", ironizó el presidente Nicolás Maduro este jueves en un acto público.
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Mientras algunas personas le gritaban "jalabolas (aduladora) del imperio" y otras coreaban "libertad", la esposa de López negó que su reunión con Trump, con el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, y con el senador republicano Marco Rubio constituya una intervención en los asuntos de Venezuela.
"En derechos humanos no existen fronteras; el líder del mundo que pide la libertad de un preso político, es un líder demócrata, el que no, es cómplice de la dictadura. Saben que somos los venezolanos los que vamos a salir de esta dictadura, nadie va a intervenir", sostuvo.
López purga una pena de casi 14 años de prisión acusado de incitar a la violencia en las protestas para exigir la renuncia del presidente Nicolás Maduro, que dejaron 43 muertos entre febrero y mayo de 2014.
Tintori reiteró la convocatoria a una marcha el próximo sábado para conmemorar tres años de la detención de su marido. "Salimos a la calle el 18 de febrero para decirle a la dictadura que se vaya", dijo.
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