Autoridades detuvieron a un hombre que decidió romper el confinamiento y se sorprendieron al conocer la identidad del sujeto que alegaba haber salido solo a comprar una copia del videojuego Call of Duty.
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Clint Butler y un amigo se estaban caminando por una calle en la ciudad de Birmingham, en Inglaterra, cuando vieron a la policía y cambiaron de rumbo, lo que levantó sospechas.
Por ello, uniformados los detuvieron y, al cuestionar su identidad y por qué estaban en la calle, su acompañante dijo que habían decidido salir a buscar el nuevo Call of Duty porque "no puedo quedarme solo sentado durante el encierro”.
Cuando los oficiales se disponían a verificar detalles, Butler arremetió y pateó a uno de ellos en la ingle, por lo que de inmediato reaccionaron y pidieron refuerzos.
Tras someterlo, la identidad del sujeto se estableció rápidamente y ahora está de vuelta tras las rejas. Fue encarcelado durante 13 meses por fugarse de la cárcel y 6 meses por agredir a los agentes.
Antes de escapar de la cárcel, en noviembre de 2020, pagaba una sentencia de 17 años por varios cargos, incluidos robos y delitos con armas de fuego, que debía terminar en 2024. Los esfuerzos para encontrarlo habían sido infructuosos.
"El motivo por el que decidió arriesgarse a ser devuelto a prisión al tomar la estúpida decisión de venir a la ciudad durante el encierro con un amigo para comprar un videojuego seguirá siendo un misterio", comentó el superintendente Nick Rowe.
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