El papa Francisco saludó este sábado en Río de Janeiro a un grupo de indígenas del Amazonas y no dudó en colocarse en la cabeza un adorno de plumas, conocido como "cocar", que llevaba uno de los aborígenes y se lo ofreció.
El hecho ocurrió al final del encuentro que mantuvo con la clase dirigente de Brasil, en el Teatro Municipal de la ciudad carioca, y saludó a representantes de los diferentes estamentos sociales.
A una mujer indígena la bendijo y la besó. Después saludó a un indígena, al parecer un jefe de una de las comunidades del Amazonas, quien se quitó el "cocar", confeccionado con plumas blanca y marrón, y se lo colocó al papa, quien no dudó en "posar", en medio de los aplausos de los presentes.
Después se lo quitó y lo volvió a colocar en la cabeza del indio.
Publicidad