Hasta el opositor Henrique Capriles resultó con complicaciones respiratorias durante enfrentamientos entre Policía y manifestantes que pedían renuncia de Maduro.
Estos choques se desataron cuando una marcha, que reunió a unas 10.000 personas, cambió de rumbo para dirigirse al centro de Caracas y fue impedida de avanzar por un barrera que más temprano habían instalado los uniformados.
"Capriles está buscando unos muertos para incendiar el país", denunció el dirigente oficialista Freddy Bernal.
Opositores se concentraron en una autopista a la altura del barrio acomodado de Altamira, según el plan original, pero dirigentes como el excandidato presidencial Henrique Capriles pidieron luego movilizarse hacia la Defensoría del Pueblo, en el centro.
“Nos mueven de aquí, pero seguimos, esto está a punto", declaró Elías González, estudiante universitario.
El gobierno suele impedir cualquier movilización opositora hacia el centro, que el chavismo considera su bastión y donde se concentran las sedes de los poderes públicos.
Los fallos, anulados parcialmente el sábado tras fuerte presión internacional, han impulsado a los detractores del gobierno a retomar su estrategia de calle, venida a menos en los últimos meses.
En tanto, los oficialistas protestaron contra el "golpe parlamentario" que alegan quiere dar la Asamblea en su cruzada contra el TSJ.
Desde una tarima, Diosdado Cabello uno de los principales dirigentes chavistas llamó a la Milicia Bolivariana, un grupo civil armado por el gobierno, a "pasar a la alerta combativa cuando la derecha pase la raya y crea que va a darle un golpe de Estado a Maduro"
El mandatario, quien asistía esta tarde a una misa ecuménica como parte de un "congreso por la paz", acusa a la oposición de querer "llenar las calles de sangre" para derrocarlo.
Según él, con el apoyo de Estados Unidos y la Organización de Estados Americanos (OEA), que esta semana declaró una "grave" alteración del orden democrático en Venezuela.
El secretario de la OEA, Luis Almagro, se reunió este jueves en Washington con el presidente del Legislativo, el opositor Julio Borges.
"Vamos a enfrentar al imperialismo, a los grupos económicos que quieren tumbar al gobierno revolucionario", dijo a la AFP Vismar Cifuentes, empleado público.
Como ocurrió durante una protesta opositora el pasado martes, que también dejó heridos y apresados, este jueves había fuerte presencia militar y policial.
La protesta opositora apoyó un proceso iniciado el miércoles en la cámara para destituir a los magistrados del TSJ.
Pero antes de que el Parlamento pueda actuar, el llamado Poder Moral debe certificar que los jueces cometieron una "falta grave", algo improbable según analistas, pues sus integrantes La Fiscalía, la Contraloría y la Defensoría del Pueblo son cercanas al gobierno.
Updated: abril 06, 2017 06:29 p. m.