Glaciares del Ártico están, literalmente, desapareciendo. Esta región se está calentando dos veces más rápido que el resto del planeta.
Pese al preocupante panorama, expertos advierten que aún se puede salvar algo del Ártico. “Entre más rápido mejor”, asegura Kim Holmen, del Instituto Polar noruego.
Se calcula que pequeños glaciares en Europa, como estos, perderán más del 80% de su masa de hielo de aquí a 2100 si continua el actual escenario de altas emisiones de gases de efecto invernadero.