Tras una histórica visita de dos días y medio, el papa Franciscodejó Grecia. El sumo pontífice viajó a ese país para llevar un mensaje que permita una mejor integración de los migrantes en Europa.
Antes de partir, Francisco se reunió con los jóvenes de una escuela, a quienes les pidió que no se encierren en la tecnología y dejen a un lado los encuentros virtuales, para buscar los presenciales.
Mientras subía al avión que lo llevó a Roma, el papa Francisco se tropezó.
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Por fortuna la situación no pasó a mayores.
Ya dentro del aeronave, el papa pidió que se analice con calma y perspectiva histórica el reporte de miles de abusos sexuales por parte de miembros de la Iglesia en Francia.