La paranoia se apoderó de un sacerdote indio quien discutió con un hombre sobre la necesidad de un sacrificio humano para satisfacer a las deidades que se le habían manifestado mientras dormía.
Según medios locales , la pelea trascendió al punto de que el guía espiritual, identificado como Sansari Ojha, noqueó a la víctima de 52 años y le cortó la cabeza con la intención de completar un ritual.
La investigación de la Policía indicó que el sacerdote, más allá de un mensaje superior, estaba borracho en el momento del homicidio.
“A la mañana siguiente, cuando recuperó el sentido, se rindió y aceptó el crimen”, dijo el comandante de la Policía de la zona.