Los hechos se presentaron en el aeropuerto de Sofía, en Bulgaria, donde una mujer cayó de rodillas frente al pasillo de embarque luego de que las autoridades de ese país europeo no le permitieran el ingreso al avión porque su equipaje de mano superaba las medidas permitidas por la aerolínea y ella se negase a pagar más por este. En videos que hoy circulan por las redes sociales se evidencia cómo la pasajera intenta ingresar su equipaje y, cuando se hizo evidente que su bolso no cabía, el personal le explicó que tendría que pagar por equipaje adicional, a lo que ella se negó, insistiendo en que podía hacer que cupiera. Luego de golpear un par de veces y hacerle fuerza adicional logra que entre su maleta. Sin embargo, ya la Guardia Fronteriza había tomado una decisión.
Por esto, la mujer comienza a llorar y le ruega a un miembro de la policía que le permita subir al vuelo mientras docenas de otros pasajeros observaban detrás de una puerta de vidrio lo que estaba sucediendo. Todavía decidida a abordar, comienza a golpear la puerta y a pedir que le permitan su ingreso al avión, con el tiempo sus súplicas se hacen más fuertes y más personal la rodea rápidamente para contener el escándalo que estaba sucediendo.
Agotada por el esfuerzo, se ve a la mujer caer de rodillas mientras las lágrimas corren por su rostro. Los espectadores, sin poder hacer algo, relatan que “ella nos rogaba que no nos fuéramos, pero nos amenazaron con cancelar todo el vuelo si no subíamos, así que los pasajeros se asustaron y se fueron”, declaró Nikolay Stefanov, el testigo que registró la experiencia.
De acuerdo con algunos medios de Bulgaria, el video viral atrajo la atención del Parlamento de Bulgaria, lo que llevó al viceprimer ministro y ministro de Transporte Grozdan Karadjov a solicitar una inspección de las cámaras de seguridad del aeropuerto debido al comportamiento de los empleados durante toda la situación.
Por su parte, Goldair Handling Bulgaria, encargados de supervisar el cumplimiento de estas normas por parte de las aerolíneas, emitió un comunicado en respuesta a toda esta situación insistiendo en que sus empleados actuaron "profesionalmente y sin ningún contacto físico con el pasajero". “Todas las normas relativas al equipaje de los pasajeros, su tamaño permitido y las tarifas a pagar por el equipaje son determinadas única, completa y unilateralmente por las aerolíneas”, afirmó la compañía. "Esto también aplica al equipaje de mano, ya que Goldair Handling Bulgaria OOD está obligada a controlar las dimensiones de este equipaje y a cobrar las tarifas por exceso de equipaje. El personal actuó con profesionalidad y sin contacto físico con el pasajero”.
Este suceso llega luego de que a principios de este mes se denunció que la aerolínea Ryanair le paga a sus funcionarios 1,50 euros, unos 7.243 pesos aproximadamente, por cada maleta que supere las medidas permitidas en cabina.
ANDRÉS ADAMES
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