Al menos seis personas murieron y más de una decena resultaron heridas este miércoles en violentas manifestaciones en Haití, que reunieron a varios miles de personas que exigían la salida del primer ministro, Ariel Henry, tras 30 meses en el poder sin resultados concretos.
Entre los fallecidos hay cinco agentes de la Brigada de Vigilancia de las Zonas Protegidas (BSAP), una nueva entidad armada sobre la que las autoridades han perdido completamente el control, que cayeron durante enfrentamientos con agentes de la Policía Nacional de Haití en la zona de Laboule, en las colinas de la capital.
Por la mañana, una persona murió en Ouanaminthe, en el noreste del país, tras atacar una comisaría de la Policía Nacional, que tomó violentas represalias contra los manifestantes, en una jornada en la que se mostraron muy ofendidos e incluso amenazantes.
Protestas violentas en todo Haití
En Les Cayes, Jérémie y otras ciudades de provincia, los violentos enfrentamientos entre la Policía Nacional y los manifestantes dejaron numerosos heridos, algunos por impactos de proyectil en la espalda o la cabeza, y también se produjeron saqueos de comercios y el incendio de instituciones públicas.
En muchas partes del país entre los manifestantes había personas que portaban armas de fuego, machetes y cuchillos, decididas a forzar la marcha del primer ministro, que hasta ahora ha guardado silencio sobre las protestas callejeras, incluso en esta jornada que marcaba el fin de su mandato, en virtud de un acuerdo firmado en diciembre de 2022.
En el área metropolitana las protestas organizadas por la oposición fueron dispersadas violentamente por agentes policiales que utilizaron gases lacrimógenos y balas para impedir que llegaran a su destino.
Al final del día, muchas calles y barrios de la capital permanecían atrincherados, dejando las calles vacías de gente.