Criminales dispararon contra los uniformados cuando se encontraban realizando una reseña a un peligroso delincuente. Ofrecen 50 millones de pesos por información de los responsables.
Asesinato del patrullero Edwin Caro dejó en evidencia a lo que se enfrentan en la capital. Uno de ellos recibe la bendición de su familia cada día antes de salir.
Sus padres, en medio del llanto, suplicaron a la alcaldía que salvara a sus hijos. Fueron rescatados en camionetas blindadas y tanquetas de la Policía.
Las víctimas son el subintendente Jonathan Eduardo Bastidas, de 35 años, y el patrullero Justino Alexander Dávila, de 28. Autoridades le atribuyen el ataque al ELN.