Atención: sigue la búsqueda de participantes para estudio sobre el Alzheimer

El grupo Neurociencias de la Universidad de Antioquia ha trabajado durante tres décadas para detectar, caracterizar y trabajar la enfermedad del Alzheimer desde lo médico, lo social y lo epidemiológico.

El grupo cuenta con suficientes evidencias para pensar que ciertos tratamientos, que están en periodo de prueba, podrían retrasar la aparición de la enfermedad en personas sanas con riesgo genético de desarrollarla. Por eso comenzó un importante estudio colaborativo internacional para evaluar posibles terapias.

Según el equipo investigador, los ciudadanos de Medellín pueden participar en el proyecto; quienes deseen hacerlo deben ser personas sanas con antecedentes familiares de Alzheimer precoz.

El profesor Francisco Lopera, director del grupo de Neurociencias, indicó que las condiciones son: “una persona que tenga en su familia alguien afectado con pérdida de memoria, iniciada a edad muy temprana, a los 40 o 45 años. Además, que ese familiar haya desarrollado demencia, es decir, perdido la memoria a un grado tal que requiere de un cuidador para sus actividades diarias”.

El estudio de una terapia preventiva para la enfermedad de Alzheimer se está haciendo en personas sanas, entre 30 y 60 años, que tengan alto riesgo de contraer la enfermedad por pertenecer a un grupo familiar con Alzheimer precoz hereditario.

Quienes estén en este grupo de riesgo, pueden comunicarse con el Grupo de Neurociencias de Antioquia al teléfono 2196664, en Medellín, o al celular 3137161810. Los interesados serán atendidos y orientados para saber si efectivamente coinciden con las características de riesgo y si pueden ser convocados a participar en el estudio.

En el sitio web neurociencias.udea.edu.co , los interesados pueden llenar una encuesta que les ayudará a saber si pueden ser participantes.

El Alzheimer es una dolencia que deteriora el cerebro y causa pérdida progresiva de la memoria y el lenguaje, deficiencias cognitivas y otros efectos devastadores tanto para las personas que lo padecen como para sus familias.

Durante años científicos e instituciones de todo el mundo han buscado comprender, tratar y prevenir esta dolencia. Hasta diciembre de este año se estarán recibiendo voluntarios que deseen aportar al descubrimiento de la cura para esta delicada enfermedad.