El 12 de julio de 2024 terminó la espera de una madre colombiana que había guardado durante años un doloroso secreto: la adopción de su bebé. Por 41 años, esta mujer buscó a su hija e hizo todo lo que estaba a su alcance para reencontrarse con ella. Lo que Isabella no sabía era que su hija, Christelle Claudia Lebrault, desde Francia, también había emprendido una intensa búsqueda. Todo terminó en una fiesta en Colombia.
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Isabella Pérez tenía 14 años cuando su madre la envió a una fundación para ocultar su embarazo, estando allí, dio luz a su bebé. “Tuve una hija, la dieron en adopción y la voy a buscar”, aseguró a Séptimo Día.
Mientras en el 2015, cuando tenía 47 años, Isabella deseaba volver a ver a su hija, pese a que ya había conformado una familia con dos hijos, desde el otro lado del mundo Christelle daba a luz a su segundo hijo. La mujer contó que nunca dejó de pensar en su primera bebé, esa que tanto amo y que nunca quiso darla en adopción.
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Por su parte, Christelle Lebrault confirmaba que “convertirme en madre me hizo querer saber más sobre mis orígenes y en mi madre biológica...Por supuesto, el hecho de ser madre fue detonante de este deseo”.
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El milagro ocurrió después de que cada una se realizó una prueba de ADN y cuyos resultados fueron publicados una plataforma mundial especializada e hicieron “match”.
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Un emotivo reencuentro que terminó en fiesta
Ya juntas en Bogotá, Christelle conoció su ciudad natal, reconoció a su familia y visitó la fundación donde fue dada en adopción. Luego, Isabella organizó una gran fiesta para Christelle, su esposo y su hijo mayor, para que se sintieran en casa.
En medio del baile, la música y la gastronomía típica, Christelle disfrutó toda la noche. Probó uno de los platos más representativos de nuestro país, la lechona, y también aprendió a bailar salsa con sus familiares.
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Finalmente, después de 13 días en el país, Christelle regresó con su esposo y su hijo a Francia, con el anhelo de algún día volver a verse con su mamá biológica y sus familiares.
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