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La trágica muerte de la comunicadora social y periodista Laura Camila Blanco Osorio, ocurrida la madrugada del 27 de julio de 2025, conmocionó al país. La joven de 27 años falleció tras caer desde el noveno piso de su apartamento, ubicado en un edificio del noroccidente de Bogotá. Aunque la primera versión, ofrecida por su pareja sentimental, Óscar Santiago Gómez, apuntaba a un suicidio, su familia se rehusó inmediatamente a creer esa hipótesis. Séptimo Día conoció el caso.
Tras casi tres meses de los hechos, la investigación sigue en curso. La Fiscalía ha señalado que el caso podría corresponder a un presunto feminicidio agravado.
Laura Camila Blanco era la hija mayor de Walter Blanco y Cecilia Osorio, quienes le inculcaron desde pequeña el valor del estudio y el esfuerzo. Sus padres la recuerdan como una joven “muy inteligente”, perseverante y decidida a salir adelante. Su hermano, Joan Blanco, la definió en una sola palabra: “excelencia”.
En 2016, tras graduarse como bachiller, ingresó a la Facultad de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Sergio Arboleda en Bogotá. A sus 24 años, Laura se graduó con honores.
Laura Camila Blanco inició una relación sentimental con Óscar Santiago Gómez, a quien conoció en la agencia de publicidad donde trabajaba. Con el tiempo, lo que parecía una relación estable, según relatan sus allegados, se convirtió en un vínculo marcado por el control.
“Las cosas empezaron a ir mal a raíz de la desconfianza de él hacia ella y como de los celos”, aseguró su amiga Salomé Salazar. Además, agregó que Óscar Santiago le revisaba el teléfono, correos y redes sociales.
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La madre de Laura también relató que él tenía "actitudes posesivas con ella". Incluso la manera de vestir de Laura se convirtió en un motivo de disputa. Santiago le decía "que ella se vestía como si saliera a buscar hombres". En algunas ocasiones, "le decía que ella estaba gorda". Laura, según su amiga, se sentía "juzgada" y empezó a cambiar muchas cosas.
Cinco meses antes de la tragedia, en febrero de 2025, la pareja tuvo una fuerte pelea en una fiesta de quince años. El motivo fue el vestido de Laura, ante lo cual él le dijo “que se vestía como una prostituta”, recordó la mamá. El hermano de Laura, Joan Blanco, tuvo que intervenir en esta ocasión, donde hubo agresiones físicas. Santiago mismo admitió en su declaración al CTI haberle dicho a Laura “que sí, que era una prostituta”.
La noche del 26 de julio de 2025, Laura y Santiago organizaron una reunión para celebrar la graduación de él como ingeniero de sistemas. Tras asistir a un bar en Bogotá, el grupo de amigos se dirigió al apartaestudio de Laura Camila. Allí llegaron pasadas las 4 de la mañana.
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Mientras el grupo de amigos permanecía en la sala, a pocos pasos, en la habitación principal, ocurrió lo peor. Sebastián Bolívar, residente del piso 15, escuchó "gritos de auxilio como de personas pidiendo ayuda". Laura Camila Blanco había caído del noveno piso.
Cuando las autoridades llegaron al lugar, encontraron a Óscar Santiago “en alto grado de alicoramiento”. Según su testimonio, había tenido “una fuerte discusión con Laura y ella manifestó que se iba a suicidar”. Aseguró que intentó sostenerla, pero no alcanzó a evitar la caída. Una versión que no era creíble para los padres de la joven.
Posteriormente, en su declaración, Gómez detalló que, durante la discusión, ella le hizo "lesiones en la cara". Según su relato, Laura "corrió hacia la ventana y con la mano izquierda de ella deslizó la ventana, la cual estaba cerrada. Subió su pie izquierdo y en ese momento yo avancé hacia la ventana a tratar de cogerla [...] y vi cuando se lanzó al vacío".
Sin embargo, la familia de Laura no aceptó esta versión desde el inicio. La madre al enterarse de la muerte, se repetía: "Tengo que ser fuerte". Su padre, Walter Blanco, enfatizó: "Mi hija no se suicidó. Ella era una mujer de muchos sueños. En la vida mi hija se iba a suicidar". Para ellos, era imposible que Laura tuviera un perfil suicida, incluso así lo afirmó su amiga Salomé Salazar: “No había ninguna razón ni ningún antecedente".
"Sabemos que ella peleó, que ella luchó, que ella se defendió, pero no le alcanzó la fuerza", dijo entre lágrimas la madre de la víctima. El padre de Laura también señaló inconsistencias físicas en la versión del novio, dada la dimensión de la habitación. “Era imposible lo que él dijo que había corrido, se había lanzado porque el espacio era muy reducido, era muy pequeño. No cabe en la cabeza de nadie que ella hubiera hecho eso”, dijo. La madre de Laura recalcó que si la joven se acercaba a la ventana, Santiago, que era "un hombre fuerte", la hubiese podido detener estirando el brazo.
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Además, según el subintendente Arnold David Ortiz, quien llegó a la escena de los hechos, dejó un detalle plasmado en su bitácora: “Se notó con extrañeza que la ventana estaba cerrada. Si se supone que en ese momento la ventana tuvo que haber estado abierta".
Tras la muerte de la joven, el clamor de justicia de su familia encontró respaldo en la evidencia forense. El dictamen de Medicina Legal dio un giro contundente al caso. Osvaldo Medina, abogado de la familia, reveló los resultados de la autopsia: “Laura Camila fue estrangulada, fue asfixiada, luchó por su vida", afirmó.
El examen de Medicina Legal concluyó que la causa de muerte fue "asfixia mixta" y la manera de muerte fue "violenta que orienta a homicidio".
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El médico forense Aníbal Navarro detalló que lo que demuestran esas heridas es que Laura Camila "antes de caer al vacío fue estrangulada". Señaló que en el cuerpo de la joven se encontró "sofocación y unos signos de estrangulación. Hay una asfixia previo a esa caída". Además, el cuerpo de Laura reveló que “hay unas descamaciones o sea un levantamiento de las uñas". Este hallazgo, según Navarro, está descrito en medicina forense como una señal de que la persona "estaba consciente e intentó defenderse".
Para el abogado Medina y la familia, esta prueba fue concluyente: "Estamos en presencia clara de un delito de feminicidio perpetrado por la pareja sentimental de Laura Camila". Medina sugirió que Santiago, de 28 años, intentó borrar la evidencia: "Él pensó seguramente que arrojando a Laura Camila, moribunda por la ventana de ese apartamento iba a poder borrar esos signos de maltrato físico extremadamente violentos que le causó en el cuerpo esa madrugada del 26 de julio".
En el apartaestudio, además de Laura y Santiago, había otras siete personas, la mayoría amigos de él. Estos amigos se encontraban en la sala, mientras que Laura y Santiago estaban en el cuarto principal. ”¿Cómo en un lugar donde hay tantas personas, hay una persona que le puede hacer daño a otra sin que nadie se dé cuenta ni nadie haga algo?", se preguntó la familia.
Aunque en un principio, los amigos manifestaron que escucharon "una algarabía y gritos" antes de que Óscar saliera gritando que "la señorita Laura se había arrojado el vacío", varios de sus testimonios al CTI sugieren que, si bien escucharon la discusión, no intervinieron.
El abogado de la familia ha señalado que es necesario investigar si hubo "una omisión por parte de esas seis personas o si podemos estar hablando de una complicidad para encubrir lo que realizó Óscar Santiago". La familia está convencida de que Laura gritó por ayuda, pues "el solo instinto de defensa hace que uno grite para que alguien lo ayude. Obviamente, ella gritó, pero los gritos no fueron escuchados por nadie".
Tras conocerse el dictamen de Medicina Legal, el 21 de agosto de 2025, Óscar Santiago Gómez fue capturado por unidades del CTI de la Fiscalía. Horas después, en una audiencia virtual, la Fiscalía le imputó el delito de feminicidio agravado.
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En la audiencia virtual, Óscar Santiago Gómez se negó a aceptar los cargos imputados. Actualmente, se encuentra detenido en una cárcel mientras avanza el proceso en su contra. La familia de Laura Camila Blanco exige la "condena máxima posible por el delito de feminicidio".
Cecilia Osorio, madre de Laura Camila, enfatizó que la única certeza que tienen es que esa madrugada truncaron el futuro de una joven ejemplar. Hoy, buscan transformar su dolor en una causa: "Nosotros decimos que, con una mujer, una sola que pueda salvarse a partir del testimonio de lo que le pasó a Laura Camila, nosotros ya nos vamos a dar por bien servidos”.