En 2018 se registraron 32 plagios. Lo preocupante es que si bien era un arma de guerra del ELN, ya hay otros grupos que también los están cometiendo.
Tres son los delitos que aumentan en Arauca y se callan por miedo: el secuestro con la modalidad exprés, el robo de ganado o abigeato y el reclutamiento de niños y jóvenes de minorías vulnerables como indígenas y campesinos.
"Nosotros hemos pasado por ya más de cuatro secuestros en la familia, de un asesinato de un tío de aquí del municipio que también fue líder político. La verdad es que la tragedia de la violencia en nuestra familia ha sido de gran impacto”, dice José Leonardo Ataya, gerente de la empresa de servicios públicos.
Él es una de las cinco víctimas de secuestro del último año que se conocieron. La angustia tuvo un final feliz después de 8 meses de cautiverio.
Los elenos lo secuestraron en Colombia y lo mantuvieron cautivo en Venezuela, bajo situaciones inhumanas.
"Yo estuve encadenado de pies por las noches, en el día me retiraban las cadenas", cuenta.
Dice que en Arauca pagar la vacuna o cuota extorsiva los grupos armados, no es garantía de libertad.
Una libertad con fecha de vencimiento, porque los sectores productivos son la renta fija de los armados. El impuesto de guerra que ha perdurado por 40 años.
"Arauca era para que fuera un departamento pujante como Antioquia, como la Costa Atlántica y a pesar de que tenemos los recursos la violencia no ha dejado que prospere. Estamos cansados de estar arrodillados mientras en Bogotá usted puede respirar hollín, pero en paz, nosotros aquí respiramos oxigeno, pero con violencia", explica Ataya.
Los araucanos están cansados de estar secuestrados por la violencia y piensan ya es tiempo más que suficiente para que el gobierno los libere generando recursos para su desarrollo.
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Updated: febrero 21, 2019 05:10 a. m.