“Esa vieja me sapeó”, se oía decir a la madre del menor cuando encontró a la Policía de Mocoa en su residencia, rescatando al menor, a quien hallaron llorando.
Autoridades tuvieron que romper el candado de la puerta de la habitación donde estaba el bebé.
La madre llegó al sitio en aparente estado de embriaguez y al ser preguntada sobre la hora a la que salió a tomar ella respondió: “desde las 2:30 de la tarde”.