En Chocó creen que el regreso a la normalidad tardará varios días, pese a anuncio del ELN

Luego de que el ELN anunciara que desde este lunes 19 de agosto se levantará el paro armado que se prolongó por ocho días en el Bajo San Juan, líderes del Chocó advierten que la normalización en la zona tardaría varios días.

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En las comunidades afectadas hay desabastecimiento de alimentos, de insumos de primera necesidad, desplazamientos forzados y confinamientos que afectaron a más de 45.000 personas.

La situación es lamentable, porque dicen las comunidades que están secuestradas en sus propias viviendas. La Defensoría asegura que pese al anuncio del ELN, las comunidades se mantendrán confinadas y otras desplazadas porque continúan los enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo, además de tener información sobre que hay instalación de minas antipersonas.

Noticias Caracol en Vivo recorrió algunas comunidades y se evidenció que la crisis humanitaria es muy grave.

Una de las damnificadas por el paro armado es la señora Doralina Mosquera, a la que el hambre le pudo más que el miedo. Esta humilde campesina que tuvo que salir de su vivienda y navegar en su canoa en busca de plátanos para vender.

“Para ver si yo vendo mi racimito para comprar algo más que huevo, porque se ha aguantado hambre en el pueblo y todo. No tenemos solución de cómo comprar, porque hasta que hoy vamos a pescar con el anzuelito”.

En la comunidad de Unión, que está más o menos a una hora del municipio de Istmina, las ayudas humanitarias ni siquiera han llegado. Los habitantes dicen que están aguantando física hambre, porque definitivamente no han podido ni subir ni bajar los botes que traen los alimentos.

“Carlos Lobón Murillo, presidente del Consejo Comunitario de Unión, explicó el drama que se vive en el municipio: “Las tiendas hoy aquí en la comunidad, que son las que nos abastecen, están totalmente vacías porque no hay paso, no tenemos cómo comprar medicinas o alimentación”.

Aunque las comunidades esperan que este lunes 19 de agosto se levante el paro armado del ELN, son conscientes de que la normalidad se demorará un poco.

“Esperamos que la movilidad sea total y restricta. Sin embargo, sabemos que hay muchos temores de las comunidades de moverse a las zonas de cultivo porque hay anuncios de trampas explosivas. Hay el temor de ellas y porque las comunidades han podido evidenciar que siguen los combates en la zona”, manifestó Luis Murillo Robledo, defensor del pueblo de Chocó.

En la zona escasean alimentos e insumos como la gasolina

Felipe Martínez, representante del Consejo Comunitario General del San Juan”, dijo: “También tenemos un problema y es que no estamos preparados con todas las ayudas humanitarias”.

La directora de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, que viajó a Istmina, se reunió con líderes de los cinco municipios afectados por el paro armado. Allí definieron la ruta para seguir la atención de las familias desplazadas y confinadas en el Bajo San Juan.

Otra preocupación grave que tienen las comunidades es el tema del traslado de los pacientes. Aunque ya se ha podido mover a algunos de los más graves, otros todavía continúan allá porque no hay combustible, entonces piden urgente que haya brigadas de salud a los municipios para que puedan atender más que todo a los niños y a los ancianos, que son los más enfermos.

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