“Debemos exhumar una o dos veces a las personas. Se saca todo el sedimento que hay, se incorpora el nuevo fallecido y luego, en bolsas plásticas, se introduce en el mismo cilindro las partes óseas que están dentro del cilindro”, explicó el administrador del cementerio del municipio El Copey.
Este lugar tiene casi un siglo de uso y más de 4 mil tumbas, que tienen copada la hectárea y media que mide el camposanto.
Ante la situación, se firmó un convenio por 2.300 millones de pesos para construir un nuevo cementerio en siete hectáreas y se pactó para antes del 30 de diciembre.