Fiscalía cuenta con informes de distintas brigadas sobre el ranking de bajas exigidas para obtener ascensos, condecoraciones o permisos.
Noticias Caracol escarbó en el expediente del excomandante del Ejército. Allí, por ejemplo, encontró un documento de 2006 titulado ‘Políticas del Mayor General Mario Montoya Uribe’, que resume las 23 directrices del alto oficial para encarar la guerra, algunas resultaron inquietantes para los investigadores:
1. “Las bajas no es lo más importante, es lo único”.
2. “Los comandantes se evalúan por sus resultados”.
3. “Permisos: resultados”.
4. “Al buen comandante se le debe tener mucho respeto y un poquito de temor”.
Estas tienen a Montoya en la encrucijada judicial de su vida.
Además, llamaron la atención anotaciones que los oficiales consignaban en los libros de los batallones, brigadas y divisiones.
"El día lunes tenemos que presentar resultados al comandante del Ejército y hasta el momento no los tenemos"-
"Exíjanle a su plana mayor y si no dan la talla, relévenlos".
"Da pena una brigada que ha sido excelente en resultados operacionales y estamos reportando solo capturas".
Aunque en muchas de esas anotaciones se hacía énfasis en la transparencia de las operaciones, en otro reporte de la séptima división, elaborado por el general Luis Roberto Pico, se advierten cuentas más crudas y hasta se hacen cálculos de muertos al debe.
"A 31 de marzo de 2007, la mencionada unidad lleva como resultados operacionales 2 muertos en combate y 3 capturas. Tomando como referencia el año anterior la unidad táctica lleva una diferencia de -17 muertos en combate".
A estos registros se suman las declaraciones de los generales Jorge Arturo salgado, todavía activo, y Gustavo Matamoros, ya retirado. Ambos detallaron la política del conteo de muertos instaurada por Montoya
"La medición de los resultados era esa: la cantidad de muertos en combate", aseguró Salgado y agregó: "Muchas unidades que se vieron envueltas en falsos positivos, pues seguramente fueron objeto por esa presión de obtener resultados ante personas inescrupulosas".
El general Matamoros también declaró en la Fiscalía:
"La política del general Montoya con respecto a los combates, a las bajas, era la disminución del enemigo (...) A Montoya le tenían pánico en el Ejército y las personas que nos le enfrentamos éramos muy poquitas", afirmó.
Matamoros también contó que Montoya terminó muy molesto con el general Carlos Suárez, encargado de investigar el escándalo de los falsos positivos.
Tras sus hallazgos, en octubre de 2008, el entonces presidente Álvaro Uribe y su ministro de Defensa Juan Manuel Santos hicieron la mayor purga militar de la historia: 27 oficiales y suboficiales fueron retirados del servicio, incluidos tres generales y 11 coroneles.
El general Mario Montoya, entonces número uno del Ejército, no salió en esa purga de 2008, pero pasó al retiro pocos días después. A pesar del ruido a su alrededor, fue nombrado como cónsul en República Dominicana, cargo en el que estuvo hasta julio de 2011.
Su caso estuvo inactivo durante mucho tiempo, pero se reactivó con fuerza hace tres años y esta vez la Fiscalía parece ir en serio.
Recientemente, el general (r) Montoya pidió someterse a la Jurisdicción Especial de paz:
General en retiro Mario Montoya Uribe se somete a la JEP
Entretanto, las familias de víctimas advierten que esta es una maniobra más para evadir la justicia y solo tienen una petición: “yo aspiro a conocer la verdad completa, que no me vaya a morir sin conocer la verdad”, dice Alfamir Castillo Bermúdez, mamá de joven de 22 años asesinado por integrantes del Ejército en febrero de 2008, en Caldas.
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Doloroso cara a cara entre familiares de víctimas de falsos positivos y militares implicados
Updated: septiembre 02, 2018 07:51 p. m.