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Habitantes de Caparrapí, en Cundinamarca, denuncian que funcionarios de la administración municipal se fueron a una finca en zona rural del municipio para celebrar un cumpleaños y sin cumplir con los protocolos de bioseguridad frente al COVID-19.
El concejal Antonio Ardila dice que son varias las “fiestas clandestinas que se han venido realizando, en especial la del 19 de junio, donde participaron algunos funcionarios de la administración municipal, violando varios protocolos de bioseguridad, como es el uso del tapabocas, el distanciamiento y las aglomeraciones”.
El alcalde de Caparrapí, Gonzalo Ramírez, lamentó el hecho del que, sostuvo, “no tuvimos el conocimiento ni nosotros ni la Policía Nacional, pero el cual ya tomamos medidas pertinentes para sus debidas sanciones”.
Autoridades indagan si los asistentes a la fiesta tenían contrato por OPS o eran funcionarios de libre nombramiento y remoción.
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Ante la difícil situación que vive el país por el pico del COVID-19, los habitantes de Caparrapí piden a los funcionarios dar ejemplo de comportamiento.
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