Tras la grave situación que se presenta en el corregimiento El Mango, norte del Cauca, dondela Policía fue expulsada por la comunidad , los habitantes de esta población piden a las autoridades que los escuchen antes del retorno de los uniformados. Aseguran que en ocho años de presencia de la fuerza pública han tenido que soportar muerte y destrucción.
Las ruinas de más de cincuenta viviendas destruidas por las tomas guerrilleras son la evidencia de la guerra que han tenido que soportar los residentes de esta localidad ubicada en el municipio de Argelia.
"Hemos tenido muertos. Han destrozado casas y animales, han destruido nuestras vidas. Los niños están afectados psicológicamente", aseguró Íngrid Daza, residente de El Mango.
Por esta razón, la comunidad asegura que no permitirá que la Policía se instale nuevamente en el corregimiento. "Vivíamos en un desastre por temor a los cilindros. Los tiros que a cada rato se sentían en la población", dijo Pedro Nel Álvarez, habitante del corregimiento.
Publicidad
Sin embargo, los habitantes también aseguran que están dispuestos a dialogar con las autoridades para buscar una solución concertada.
"El general Palomino dijo que iba a entrar la Policía aquí a como diera lugar. El Ministro de Defensa también. Andamos desarmados, ni palos, ni machetes, ni nada, pero la comunidad dice que no va a dejar entrar a la Policía", expresó Dagoberto Muñoz, presidente de la Junta de Acción Comunal.
Publicidad
Asimismo, los residentes de este corregimiento afirman que el incendio a una vivienda que servía de cocina a los uniformados fue provocado por los mismos policías.
En helicópteros, los policías que fueron sacados de El Mango están siendo trasladados a un cerro muy cercano a la población, en espera de que se defina si retornan o no.