En un video grabado el 12 de mayo se evidencian las campañas emprendidas por este uniformado, cuya pérdida ha sido dolorosa para la ciudad.
En la grabación, Erik pedía mantener el uso del tapabocas, hacer un lavado constante de manos y guardar la distancia con las personas.
Esa labor solidaria la cumplía, en favor de sus compañeros, a través de la unidad de salud de la Policía y en las calles de Cartagena, donde enfatizaba sobre la peligrosidad de la pandemia.
“Era una persona que servía a nuestros usuarios en los diferentes requerimientos y, la verdad, una persona muy servicial para la comunidad”, dijo sobre Jiménez el intendente Henry Mercado.
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A sabiendas de que integraba la primera línea de riesgo, tomaba las precauciones debidas, pero inesperadamente sufrió el contagio y el virus lo diezmó en pocos días de hospitalización.
“Perdemos a un miembro de nuestra familia, pierdo a mi compañero de trabajo”, dijo la médica Diana Alicia Castañeda.
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Jiménez era oriundo de Soledad (Atlántico) y tenía 38 años, 18 de los cuales los dedicó a la Policía y le merecieron 40 felicitaciones, siete condecoraciones y una exaltación especial por sus aportes al desarrollo humano y social.
“Desde el momento de ser policía estamos obligados a proteger la vida y como enfermero también hacemos énfasis a salvaguardar la salud y la salubridad”, decía el uniformado.
Sus advertencias, sobre todo en las comunidades más vulnerables, ayudaron a salvar vidas, pero perdió la propia frente a un enemigo silencioso pero letal.