Diversos sectores de la opinión pública y la sociedad civil criticaron el nuevo protocolo para las labores de pedagogía en la socialización de los acuerdos de paz entre las bases de la guerrilla. La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) criticó las restricciones a la prensa y pregunta si lo que se busca es coartar a los periodistas o controlar a la guerrilla.
“Si uno se atiene a la literalidad de lo que está allí escrito pues eso es una restricción desproporcionada que no se ajusta a estándares de libertad de expresión”, aseguró el director de la FLIP, Pedro Vaca.
El procurador Alejandro Ordóñez, también se sumó a las críticas, en lo que calificó “una restricción contra la libertad de prensa”.
Sin embargo, para la Organización de las Naciones Unidas (ONU) no se trata de censura, “porque las reuniones entre la secretaría de FARC y sus bases normalmente no tienen medios y ellos también van a hablar de cosas altamente sensibles”. Así lo indicó el alto comisionado Todd Howland.
Pero ese no fue el único tema que causó polémica. Para el Centro Democrático, se le está entregando el control a la guerrilla, en zonas como Buenos Aires, Cauca. “No entiendo para qué el Gobierno le pide al congreso que se modifique la ley de orden público cuando el presidente de la República directamente está autorizando los despejes”, indicó el senador uribista Ernesto Macías.
Sin embargo, el codirector del partido de la U, Hernán Penagos, niega esa versión: “Hoy en el territorio nacional no hay centímetro de Colombia vedado para la fuerza pública”.
Updated: marzo 04, 2016 06:31 p. m.