Para poder cometer el crimen, el asesino mandó primero al hijo de ambos a hacer un mandado. El caso se registró en Valledupar, Cesar.
La víctima recibió una herida mortal en el pecho. Después, con la misma arma, el hombre se propinó un disparo en la cabeza. La mujer fue identificada como Beatriz Polo Granados.