Durante el mandato del general Gustavo Rojas Pinilla, 61 años atrás, a la mujer se le concedió el derecho de ser elegidas y de elegir libremente.
La primera cédula se expidió el 25 de mayo de 1956 y fue precisamente a la primera dama de la República, Carola Correa de Rojas Pinilla, a quien la Registraduria Nacional del Estado Civil le entregó el número de identificación 20.000.001 de la ciudad de Bogotá.
Al año siguiente y por medio de un plebiscito constitucional las mujeres obtuvieron el derecho a participar en los comicios electorales y a ejercer cargos públicos. Cerca de 1.900.000 mujeres participaron.
Sesenta años después, las mujeres colombianas no solo han ejercido el derecho a votar, sino que han llegado a los cargos más altos de la administración pública.
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Sin embargo, todavía ninguna ha sido elegida como jefe de Estado. Un logro que ellas esperan conseguir en los próximos años.